No encajo. Y me importa una mierda.
Todavía no tengo el título de médico, pero tengo algo que no se enseña en la universidad:
La sabiduría del camino.
He recorrido miles de kilómetros, dormido en la intemperie, hablado con sabios sin diploma y enfrentado situaciones donde no había más que intuición, conocimiento real y las ganas de no quedarse mirando.
Antes de medicina, mi primera carrera fue Turismo.
Me especialicé en gestión del riesgo y emergencias, trabajé en zonas rurales, selvas, desiertos y montañas. Lugares donde la medicina tradicional no llega, donde las emergencias no esperan y donde la ayuda viene —si viene— desde uno mismo.
Ahí descubrí lo que ningún libro enseña:
Los viajes no solo enseñan geografía o cultura. Enseñan medicina. Enseñan humanidad. Enseñan lo esencial.
TRACES nace de esa mezcla.
MEDICINA VIAJES EDUCACIÓN
La trinidad que me representa y que rompe con el modelo tradicional del médico perfecto, del académico de salón o del turista de Instagram.
Esto es otra cosa.
Soy de esos locos que no encajan
Que viven en otra frecuencia.
Que no pierden tiempo en cosas sin alma.
Y que no necesitan la aprobación de nadie para saber quién carajo son.
TRACES no es mi marca.
Es mi manifiesto.
Y si estás leyendo esto, tal vez también sea el tuyo.
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“El médico que solo sabe medicina; ni medicina sabe”